Manifestación por la libertad de Abdullah Öcalan

(AW)Decena de miles de manifestantes exigieron en distintas movilizaciones en Turquía y en territorio Kurdo la libertad de Abdulá Ocalán, líder del Partido de los Trabajadores Kurdos (PKK), preso en una prisión turca desde 1999.

Por Alejandro Haddad, Agencia Walsh

El pasado domingo, decena de miles de manifestantes se movilizaron en las ciudades de Amed, capital de Kurdistán; Ankara, capital de Turquía, y otras ciudades de medio oriente, para exigirle al gobierno turco la libertad de Abdullah Öcalan, dirigente máximo del Partido de los Trabajadores Kurdo, detenido en condiciones miserables en el penal de Imrali.

Juicio injusto

El 15 de febrero de 1999, Apo, como llaman los kurdos a su dirigente Abdullah Öcalan, fue sentenciado por la justicia turca a pena de muerte, acusándolo de la guerra de independencia que durante quince años mantuvo el PKK contra el gobierno de Ankara.

En mayo de 2003, el tribunal de Estrasburgo vinculó a la corte de seguridad del Estado de Ankara con las fuerzas militares, declarando que el juicio fue imparcial.

En ese marco, la Corte Europea de Derechos Humanos, condenó a Turquía por violar los derechos humanos del líder kurdo, declaradno que Öcalan no tuvo un juicio justo.

Situación Actual

Apo fue juzgado bajo un sistema de justicia que luego fue abolido en Turquía, como parte de las reformas exigidas por la Unión Europea para que ese país pudiera sumarse a la comunidad.

Si bien la pena de muerte fue conmutada a cadena perpetua, “perdonándole” la vida, Öcalan pasa sus días encerrado en la isla de Imrali, donde se encuentra la cárcel del mismo nombre. Allí, Apo pasa sus día de encierro solo, ya que es el único preso en ese penal.

Los abogados defensores de Öcalan denunciaron que durante el juicio, su defendido no tuvo acceso a la asesoría legal correspondiente, motivo que fuera utilizado por la Corte Europea para presionar al gobierno turco criticando la violación de los Derechos Humanos del detenido.

¡Edi Bese!

Los pueblos Kurdo, Persa, Árabe, Asuri y de todo Medio Oriente, fueron convocados por el PKK a manifestarse en contra de la detención humillante que sufre Abdullah Öcalan a quien se le niega la posibilidad de tener un juicio justo y ejerciendo su legítima defensa.

El movimiento kurdo que viene denunciando la situación extrema de detención de Apo, en una cárcel considerada más severa que Guantánamo, desde el mismo día de su aprensión por los servicios secretos turcos, hizo un llamado a la solidaridad internacional para terminar con el hostigamiento a su pueblo, la conspiración internacional, y la libertad y autonomía de los 40 millones de kurdos.

Al grito de Edi bese (Ya basta, en kurdo) las tiendas cerraron durante todo el día domingo, al cumplirse 10 años de la detención de Öcalan. El pueblo fue invitado a convertir “el día negro en un día blanco”.

Hegemonia, dominación, conspiración, explotación... ¡Edi Bese!